Frase dicha por la laureada, Helen Keller, autora, activista política sordo ciega!!!
Entiendo al equilibrio como el primer paso para el buen funcionamiento de las cosas, hasta para esta expresión tan importante, la cabeza erguida me presenta al mundo como una persona segura de mi misma, cuando hable serán bien recibidas mis palabras, pues no denoto ambivalencia, denoto que estoy convencida de lo que digo, una vez le dije a alguien bien querido por motivo de nuestro cumpleaños: Deseo que seas libre, que cuando la gente te vea y te salude sientan que están hablando con el hombre mas libre del mundo.
A la vez entiendo que la cabeza erguida dice que no me humillo ante mis errores y que no sedo la palabra, la clave es el equilibrio.
Puedo mantener mi cabeza erguida pero saberla bajar cuando halla fallado, saber reconocer con humildad mis lagunas y no temer ante el reproche, a la vez también comprendo que para reconocer un error no tengo porque bajar la cabeza, puedo tener mi cabeza erguida, el corazón humilde y las personas me ofrecerán su perdón.
Eso es en un aspecto...
La frase de la cabeza erguida ira a mi caso? Mi caso es que tengo un enemigo, yo no soy enemiga pero el si es mi enemigo, las razones son absurdas, lucha de poder diría yo, a final de cuentas nunca entenderé las razones, sobre vivencia tal vez, si, creo que es eso, sobre vivencia, el tipo lo que quiere es sobre vivir, la gente no da de lo que no tiene, una persona irrespetada no puede respetar, una persona mal tratada no puede bien tratar.
Cuando lo veo hacer tantas cosas en contra mía, pienso: Si no puedes con tu enemigo unetele, se paciente, ten paz.
Soy humilde, dejo pasar la injuria, trato de encontrar paz de donde no la tengo, y el se va decepcionado de no haberme sacado de mis casillas.
A veces viene y no lo resisto, lo contraataco con una de las mías, con algún insulto bien elaborado, sin intención de herir y con palabras rebuscadas, muy respetuosa pero con la voz subida algunos decibelios, pero al final es peor porque con mas fuerza entonces el me ataca para atrás...
Quiero levantar la cabeza, tenerla erguida todo el tiempo con confianza de mi misma y del Dios que me respalda, a la vez quiero tener el corazón humilde y dejar que si mis enemigos quieren mi mal, se las verán con Dios.
Lo menos que debo hacer es huir, si al alguien aquí debe huir es el diablo, no el hijo del Dios viviente, creador del cielo y de la tierra.
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