....Y más tarde descubrí que escribir era inútil, cuando viaje en el tiempo envolviéndome en escritos viejos, leí
tantas palabras, tantos deseos reprimidos, tantas quimeras inalcanzables,
tantos sueños pasmados.
Hago huelga a la escritura, huelga de mil horas, huelga
indefinida.
Tengo enojo y desencanto del derroche de las letras, tengo
enojo porque es inútil, porque no me
secan los ojos, porque no me abren las puertas…
A la escritura le hago huelga porque no convence al cielo
para que me regale la dicha, la dicha de ti, si, de ti mismo.
Tú, que el oxígeno me has cortado…
Tengo huelga porque no pagan mis cuotas, no pagan mis
andanzas, no compensan mis desvelos.
Escritura, ojala hicieras magia y abrieras las puertas que
me aprisionan, ojala y me dieras agua, si cobraras vida, escritura pudieras
cobrar vida? Entonces escribiría de descansos, compañías, bailes, risas, un
paseo en bicicleta, frente al mar en el banquito del cinema.
Escritura, pudieras cambiar mi historia?
Ponerme más corazón, hacerme grande y a la vez pequeña!
Si las letras tuvieran vida, yo hablaría de ti.
Letras, sueño con que se vuelvan espadas, sueño con que se
vuelvan agua, sol, estrellas, y la luna…
Que la luna venga, solo por un rato aquí a la tierra, para
que adorne la torre Eiffel… Suena bien.
La luna, la luna.
Si me dieran permiso permanente, yo no dejaría de contemplarte
ni un solo instante.
Huelga indefinida contra ustedes, son solo bla bla bla, son
solo tinta sobre el papel, son solo letras sobre un documento, me emocionan
soñando en desvelos para nunca despertarme.
No puedo resolver mis cargas con ustedes, tengo el corazón
cerrado…
Hasta nuevo aviso, no las quiero, corran de mi mente y de
mis dedos, no acepto sobornos ni mucho menos.
No me convencerán con la oportunidad del desahogo…
No me conformo.
Quiero que sean reales, quiero vivir despierta…
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