Desempolvando el pseudo teclado, no con paño de tela ni con paño de seda, con muchos motivos para desangrarme escribiendo, pero con poco tiempo, con poco espacio.
Feliz año me dicen todos, feliz año, les digo...
Porque caí y me levante,
porque llore y me hice mas fuerte,
porque amé y soporté,
Porque me ilusioné y me decepcioné
Porque soñé y vi mi sueño venir en las olas del mar, y en las mismas olas del mar lo veré ir, lejos de mi, escapado de mis manos..
Feliz año cobardía, has ganado un pequeño terreno..
Antes soñábamos con tener el cielo de lado,
Ahora el cielo esta en la misma ciudad pero no nos atrevemos a buscarlo...
Feliz año...
Una carga en mi espalda, un sonido en mi corazón, una ilusión que no me abandona, y en mi oído una voz: Si me crees serás feliz al fin...
Feliz, feliz, feliz...
En este año recibí sorpresas, regalos, recibí poder, gloria, una palabra, y junto con ella, un cumplimiento... Un dulce cumplimiento que tomó forma en el tiempo... Y que me mostrara su rostro pronto...
Me echaron tierra y por un momento se nublaron mis ojos, se escondió mi rostro bajo el muro polvoriento, hasta que la canción de Dios sonó repentinamente, haciéndome un eco poderoso: Si me crees serás feliz al fin...
Feliz año...
Recibí una voz un tanto cavernícola, una palabra de aliento y unas despedidas de 40 minutos... Feliz noche Iseuris...
Eres el regalo que no comprendo, no le hallo ni pies ni cabeza, pero a la vez no te cambio por otro,
Cuando el mar nos separaba, nos veíamos en la luna, en el cielo, en las mecedoras de la sala... En las serenatas a distancia, nos veíamos a un mar de distancia.
Pero ahora que no nos separa nada, ahora comprendo menos...
Feliz año, feliz aniversario...
Este año creí, el que viene seré feliz al fin...
jueves, 31 de diciembre de 2015
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